Consideramos al entrenamiento como una instancia del proceso que se da en un espacio físico y temporal el cual es permeable a los intereses individuales o colectivos de, en este caso, lxs manipuladores. Encontramos en él, la libertad de poder indagar. Impulsadxs por la búsqueda, por las ganas de explorar las suposiciones, de transitar los hallazgos y los infortunios sin la presión de crear un espectáculo.

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    Creemos que es un medio para que los objetos colonicen nuestros cuerpos. Para ello es necesario lograr un nivel de percepción y sensibilidad, transformando los mismos en materia permeable a los estímulos que nos ofrecen las cosas.